DE LA DOCTRINA
SOCIAL DE LA IGLESIA
Observatorio
Cardenal Van Thuan, 15-9-22
La IV Jornada
Nacional de la Doctrina Social de la Iglesia se realizará el próximo sábado 1
de octubre, organizada por La Nuova Bussola Quotidiana, el Observatorio
Cardenal Van Thuân y la Coordinación Nacional Justitia et Pax para la Doctrina
Social de la Iglesia. Es ya
una cita tradicional para quienes sienten la necesidad de aprovechar este
patrimonio de la Iglesia. Es un día de reflexión pero también de amistad y
convivencia. Es un día de esperanza y de relanzamiento del compromiso. El año
pasado tuvimos que suspenderlo por el Covid, ahora vuelve centrándose en un
tema destinado a sonar cada vez más en el futuro: las amenazas a la propiedad
privada que, como sabemos, es un principio fundamental de la doctrina social de
la Iglesia.
Después de las dos
ediciones celebradas en Milán, la Jornada se desarrolla desde hace dos años en
Lonigo, en la frontera entre Verona y Vicenza, en el hermoso lugar del Convento
de los Frailes Menores dedicado a San Daniele. En el teatro, en los soportales,
en los patios y en el parque del Convento será posible encontrarse y hacer
amigos. Durante la mañana, coordinado por Riccardo Cascioli, dr. José Antonio
Ureta -llegado a propósito desde París- nos explicará por qué podemos decir que
el proyecto de una sociedad de ciudadanos que no tienen nada es funcional a una
nueva dominación globalista. En la mesa redonda de la tarde, Stefano Magni,
Luca Volonté y Benvenuta Plazzotta, coordinados por Stefano Fontana, nos
hablarán sobre el peligro del nuevo capital-socialismo y cómo afrontarlo.
La Jornada, sin
embargo, también tendrá un momento muy especial sobre el que me gustaría llamar
vuestra atención. Se trata de la participación del arzobispo Giampaolo
Crepaldi, obispo de Trieste. Se dedicará un pequeño acto al obispo, que por la
mañana realizará la Lectio Magistralis sobre “La propiedad privada en la
doctrina social de la Iglesia” para agradecerle lo que ha hecho en su vida
sacerdotal y episcopal por la doctrina social de la Iglesia. la Iglesia.
Monseñor Crepaldi
cumple 75 años a finales de septiembre, todos esperamos que el Papa quiera
ampliar su ordinariato en Trieste, en todo caso es el momento oportuno para
agradecer a un Maestro de la Doctrina Social de la Iglesia. Por eso invitamos a
la jornada a todos los que han estimado y estiman a Mons. Crepaldi y
pretendemos agradecerle lo que ha hecho, especialmente en su compromiso con el
Pontificio Consejo Justicia y Paz, del que desde hace mucho tiempo es
Secretario.
El interés de la
jornada del próximo 1 de octubre deriva también del hecho de que participan 36
asociaciones pertenecientes a la Coordinación Nacional Justitia et Pax para la
Doctrina Social de la Iglesia, procedentes de toda Italia. La necesidad de
coordinar surge no sólo del hecho de que el sistema social y político se vuelve
cada vez más agresivo contra el hombre, sino también porque el interés por la
doctrina social de la Iglesia, entendida de cierta manera, está disminuyendo
mucho en la Iglesia. Hoy prevalece una pastoral desprovista de doctrina, que
olvida que la doctrina social de la Iglesia es un "corpus doctrinal"
y da vida a un saber auténtico, que luego entra en diálogo con otros saberes
sobre la sociedad y la política.
Esta exaltación de
una pastoral desligada de la doctrina impide en realidad la coherencia entre la
fe y el compromiso social y político, hasta el punto de que hoy en día muchos
en la Iglesia argumentan que es posible ser católico y, por ejemplo, estar a
favor del aborto estatal. o el reconocimiento legal de las parejas
homosexuales, o la enseñanza basada en la ideología de género. Incluso altos
prelados se expresan de esta manera. Así, además, teólogos que luego serían muy
famosos e influyentes, como Karl Rahner y Walter Kasper, se expresaron ya en
los años sesenta del siglo pasado.
Estas
observaciones, en lugar de inducir a la resignación, estimulan el compromiso de
unirse, de educarse en la doctrina social de la Iglesia según el magisterio
secular de la Iglesia, de actuar en la sociedad y en la política no según la
tesis de la doble verdad -que es válida porque la fe no puede aplicarse a la
sociedad o viceversa- sino según el principio de que el Creador, que nos da la
ley moral natural, y el Salvador, que nos da la ley de la caridad, es el único
Dios.
Stefano Fontana
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