BENEDICTO XVI: LA IDENTIDAD CATÓLICA.
VIGILANCIA CRÍTICA
De funcionaria de
Caritas Internacional a directiva de la cultura de la muerte
El 19 de enero,
Benedicto XVI, al recibir en audiencia a los participantes en la asamblea
plenaria del Pontificio Consejo “Cor Unum” -cuyo presidente es el Cardenal
Robert Sarah-, volvió a insistir en la identidad católica de las instituciones
de caridad y en el “no” de la
Iglesia “a filosofías como la de género” (Vid. NG 1181),
recordando que “la fe también proporciona el criterio correcto para evaluar las
expresiones de caridad, en el contexto actual”.
El que trabaja en los
organismos de caridad, debe orientarse por la fe
El Santo Padre afirmó
que “el cristiano, especialmente el que trabaja en los organismos de caridad,
debe orientarse por los principios de la fe, por la cual nos adherimos al
‘punto de vista de Dios’, a su proyecto para nosotros. Esta nueva visión del
mundo y de la humanidad que ofrece la fe también proporciona el criterio
correcto para evaluar las expresiones de caridad, en el contexto actual”,
(Texto en castellano, VIS, 21-01-13).
Más adelante, el
Santo Padre continuó diciendo: “Por desgracia, sobre nuestro tiempo también se
abaten sombras que oscurecen el plan de Dios. Me refiero, sobre todo, a una
trágica reducción antropológica que replantea el antiguo materialismo
hedonista, al que se suma, además, un ‘prometeísmo tecnológico’ De la unión
entre una visión materialista del hombre y el gran desarrollo de la tecnología
emerge una antropología de fondo ateo. (…) En la perspectiva de un hombre
privado de su alma y por lo tanto de una relación personal con el Creador, lo
que es técnicamente posible se convierte en moralmente lícito, todo experimento
es aceptable, cualquier política demográfica consentida y cualquier
manipulación legitimada. La amenaza más peligrosa de esta corriente de
pensamiento es, de hecho, la absolutización del hombre: el hombre quiere ser
ab-solutus, liberado de toda atadura y de cualquier constitución natural”.
Vigilancia crítica
Benedicto XVI recordó
más adelante un principio básico de la moral cristiana: con ningún motivo se
puede colaborar con el mal; y dijo: “La fe y el sano discernimiento cristiano
nos llevan, por tanto, a prestar una atención profética a esta problemática
ética y a la mentalidad subyacente. La justa colaboración con las instancias
internacionales en el ámbito del desarrollo y la promoción humana, no deben
hacer que cerremos los ojos frente a estas graves ideologías y los pastores de la Iglesia (...) tienen el
deber de advertir de estos desvíos tanto a los fieles católicos como a todos
las personas de buena voluntad y de recta razón. Se trata, de hecho, de una
deriva negativa para el hombre, aunque se disfrace de buenos sentimientos en
nombre de un supuesto progreso, o de presuntos derechos o de presunto
humanismo. Frente a esta reducción antropológica: ¿Cuál es la tarea de todos
los cristianos, y especialmente de quienes se dedican a las actividades de
caridad, y por tanto están estrechamente relacionado con muchos otros actores
sociales? Ciertamente tenemos que ejercer una vigilancia crítica y, a veces,
recusar financiamientos y colaboraciones que, directa o indirectamente,
favorezcan acciones o proyectos en contraste con la antropología cristiana”.
Reafirmación del
matrimonio como alianza de un hombre con una mujer
“La Iglesia reafirma su gran
sí a la dignidad y la belleza del matrimonio como una expresión de la alianza
fiel y fructífera entre el hombre y la mujer, y su no a filosofías como la de
género, (…) por el hecho de que la
reciprocidad entre hombres y mujeres es una expresión de belleza natural del
Creador”.
De funcionaria
vaticana a directiva de la cultura de la muerte
Como ejemplo de la
necesidad de las palabras del Santo Padre, vale lo ocurrido con Caritas
Internacional. A principios de 2011, la Secretaría de Estado del Vaticano objetó la
reelección de la secretaria general de Caritas Internacional, Lesley-Anne
Knight. En ese momento, el Cardenal Sarah, Presidente del Pontificio Consejo
Cor Unum, declaró: “Somos competentes a la hora de organizarnos, pero carecemos
de capacidad para coordinar el trabajo y reforzar nuestra identidad católica”.
Es decir, Lesley-Anne Knight, no aseguraba la identidad católica de Caritas
Internacional.
El tiempo dio la
razón a la Santa Sede.
Knight, británica, nacida en Zimbawe, ex-funcionaria de OXFAM y de la Oficina del Alto
Comisionado para los Refugiados de la
ONU , directora internacional del CAFOD (la Caritas de Inglaterra y
Gales), ha sido nombrada este año directora ejecutiva (CEO) de The Elders (vid.
NG 990, 991).
The Elders, como
informamos, es una organización, ahora presidida por el obispo anglicano
Desmond Tutu, que promueve la aceptación social y jurídica de la
homosexualidad; el aborto y la esterilización y la reingeniería de las
religiones impulsando, por ejemplo, la ordenación de mujeres y de homosexuales.
En pocas palabras, un grupo de “notables” al servicio de la reingeniería social
anticristiana del Nuevo Orden Mundial.
NOTICIAS GLOBALES,
Año XVI. Número 1071, 05/13. Gacetilla n° 1186. Buenos Aires, 21 enero 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario